martes, 23 de enero de 2018

Los animales son las víctimas ignoradas de las guerras en el mundo


Los conflictos armados, sobre todo en África, están disminuyendo hasta en un 35 por ciento a la población animal

Una pregunta fue lanzada al aire: ¿Cuáles son los animales en peligro de extinción? Y entonces vinieron las respuestas "comunes": el jaguar, el ajolote, las tortugas de mar, los leones sudafricanos, el rinoceronte blanco. Pero ninguno de los interrogados respondió: jirafas, hipopótamos, elefantes o tigres.

Aunque estos últimos son animales que no asociamos frecuentemente con la palabra “extinción”, muchos de ellos, que actualmente habitan en África, corren peligro ya no por el cambio climático ni por el calentamiento global, sino por las guerras, un fenómeno que poco a poco está terminando con un porcentaje significativo de las especies animales en el mundo.

Un estudio de la Universidad de Yale en conjunto con la de Princeton, reveló que las guerras causan un impacto irreversible en el mundo animal, y es tal el efecto, que los animales que consideramos exentos de peligro pueden dejar de existir más pronto de lo que pensamos.



Los hipopótamos son animales que también corren peligro por las guerras.

Esta investigación puso un ejemplo claro, que fue reproducido recientemente en la revista Nature: cuando estalló la guerra en lo que ahora es la República Democrática del Congo, en 1996, quedaban 31 rinocerontes blancos del norte y actualmente, en todo el mundo, sólo quedan cinco ejemplares.

No pasaron ni tres meses tras la llegada de la milicia armada, cuando los hombres armados empezaron a aniquilar a la mitad de los elefantes, dos tercios de los búfalos y tres cuartos de los hipopótamos. Investigadoras como Kes Hillman-Smith, activista ambiental, calificó para The New York Times que «el hecho de que el hábitat de los rinocerontes formara parte de un África plagada de conflictos humanos fue de "muy mala suerte"».

Lo que se intentó analizar con el estudio fue cómo es que con el pasar de las décadas, se afectó a la población animal silvestre, específicamente la de África. «Cuanto más frecuente es la guerra, mayor es la caída de la población de mamíferos», indicó el autor principal del estudio, Josh Doskin, ecologista de la Universidad de Yale.


Los elefantes son víctimas de los conflictos armados alrededor del mundo.

Lo más preocupante que plantea la investigación es que por cada año de conflicto, las zonas de guerra más frecuentes, que no necesariamente son las más sangrientas, pierden hasta el 35 por ciento de su población animal. Aspectos referentes a sequías, a caza indiscriminada y densidad de población humana, tienen también que ver con la reducción de la población animal en África.

Aunque muchos no lo ven tampoco como algo catastrófico, pues en muchas zonas de guerra las especies animales se van reduciendo de manera considerable, en otras zonas despobladas, la vida animal crece. Los científicos aseguran que la zona desmilitarizada entre Corea del Norte y Corea del Sur es, por ejemplo, un gran refugio para animales que llegan buscando refugio de zonas totalmente desprotegidas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario